Cuando se habla de Palma de Mallorca, lo primero que suele venir a la mente son el sol, el puerto, la catedral y esas tardes perezosas acariciadas por la brisa marina. Para los viajeros, elegir un hotel con piscina y vistas al Mediterráneo no es solo una cuestión de alojamiento, sino de vivir una experiencia inmersiva de descanso.
Aunque el centro de Palma no cuenta con grandes complejos turísticos frente al mar, sí esconde hoteles boutique con un equilibrio perfecto entre diseño y funcionalidad. Muchos de ellos se encuentran en el casco antiguo o frente a la bahía, con piscinas en la azotea, terrazas cuidadosamente diseñadas y un ambiente que invita a quedarse más tiempo del previsto.
Tras varias visitas e innumerables estancias, he seleccionado cinco hoteles urbanos con piscina que destacan por su ubicación, diseño y vistas: un verdadero “sueño mediterráneo” en el corazón de la ciudad.
1. El Llorenç Parc de la Mar: lujo infinito sobre la bahía de Palma
Ubicación y ambiente
Situado junto al emblemático Parc de la Mar y a escasos pasos de la majestuosa Catedral de Palma, El Llorenç goza de una ubicación inmejorable tanto para explorar el casco histórico como para contemplar el Mediterráneo. Su fachada, que fusiona influencias moriscas con el carácter mediterráneo, es solo el primer guiño a su identidad única. En el interior, cada rincón está cuidadosamente diseñado con líneas limpias, materiales nobles y un equilibrio entre elegancia moderna y calidez local. La atmósfera transmite exclusividad sin ser pretenciosa, ideal para viajeros exigentes que valoran el diseño con sentido del lugar.
Piscina en la azotea: azul de ensueño y vistas a la catedral
La joya de El Llorenç es su piscina infinita en la azotea: frente al mar y al casco antiguo, con las agujas de la catedral reflejadas en el agua y los veleros flotando a lo lejos. Amaneceres tranquilos, cielos azules por la tarde y atardeceres dorados hacen de cada momento una postal viva.
Junto a la piscina encontrarás tumbonas trenzadas, toallas aromáticas y cócteles artesanales: un lujo sereno en plena ciudad.
Habitaciones y detalles
Las habitaciones siguen el mismo estilo: tonos neutros, obras de artistas locales y, en los cuartos con balcón al mar, una luz natural que inunda todo. Algunas suites disponen de jacuzzi privado y productos de baño de alta gama.
Gastronomía y experiencias
La experiencia culinaria está dirigida por el célebre chef Santi Taura, quien reinterpreta la cocina mallorquina con técnica contemporánea y productos de cercanía. El restaurante DINS es un destino en sí mismo. El desayuno, servido en un entorno tranquilo y elegante, incluye zumos naturales, repostería recién horneada y platos calientes al gusto. El hotel organiza experiencias exclusivas como catas privadas al atardecer en terrazas secretas, salidas en yate por la bahía con picnic a bordo y rutas guiadas por el casco antiguo con historiadores locales.
2. Hotel Nivia Born Boutique: oasis urbano con alma de diosa
Ubicación y arquitectura
Ubicado en pleno Passeig del Born, el boulevard más elegante y vibrante del centro de Palma, este hotel boutique se alza en un edificio clásico del siglo XIX que ha sido cuidadosamente restaurado. La fachada mantiene su porte original, mientras que el interior deslumbra con una estética moderna, artística y ligeramente femenina. Las zonas comunes están decoradas con piezas de diseño contemporáneo y obras de arte locales, creando un diálogo entre pasado y presente. Su localización es ideal para quienes desean explorar la ciudad caminando, ya que todo está a unos pasos.

Piscina y vistas panorámicas
La piscina en la azotea, aunque no es grande, ofrece una experiencia íntima y exclusiva. Desde allí se contemplan las copas de los árboles del Born, los tejados de teja roja y las siluetas suaves de las montañas de la Serra de Tramuntana. Al caer la tarde, la ciudad se viste de tonos ocres y rosados, creando el telón de fondo perfecto para un cóctel o una sesión de fotos. El espacio incluye camas balinesas, servicio de bar personalizado y una selección musical curada para momentos de relax absoluto.
Habitaciones destacadas
Con una paleta de verdes, dorados y blancos, las habitaciones transmiten calma y feminidad. Algunas incluyen bañeras en el centro de la estancia, como un elemento decorativo central.
Las camas son ultra cómodas, con opciones de almohadas personalizadas.
Servicios y extras
El hotel ofrece paquetes románticos con champán, flores y dulces, así como sesiones privadas de fotografía al amanecer. También colabora con instituciones culturales locales, brindando pases VIP y visitas guiadas nocturnas a museos.
3. Hotel Es Princep: serenidad entre el mar y la historia
Ubicación y legado
Situado junto a las antiguas murallas renacentistas de Palma, Es Princep combina una ubicación privilegiada frente al mar con una profunda conexión histórica. La propiedad ocupa una mansión noble del siglo XVII, restaurada con gran respeto por su arquitectura original. Desde sus terrazas y ventanas se divisan los Baños Árabes, el convento de Santa Clara y las aguas del puerto. El barrio, tranquilo y auténtico, ofrece una Palma menos turística y más íntima. El diseño interior respira elegancia discreta, con materiales nobles como piedra caliza, madera local y tejidos orgánicos.
Piscina infinity: el mar a tus pies
La piscina de la azotea, abierta todo el año y climatizada en invierno, ofrece una experiencia relajante incomparable. Las barandillas de vidrio desaparecen visualmente, dejando al descubierto el mar y el horizonte. Desde allí, ver llegar los barcos de pesca o contemplar la ciudad iluminada por la noche es simplemente hipnótico. El entorno incluye camas lounge, mantas ligeras para las tardes frescas y un bar que ofrece desde smoothies revitalizantes hasta gin tonics de autor. Todo invita a la pausa, al silencio y a la contemplación.
Habitaciones y restaurante
Las suites con terraza y vistas al mar están decoradas con piedra local y mobiliario artesanal. El restaurante Bala Roja sirve una fusión refinada de cocina mallorquina tradicional y estética moderna.
SPA y actividades
El SPA incluye baño turco, aromaterapia, duchas sensoriales y masajes. También puedes apuntarte a clases de yoga, rutas privadas por el casco antiguo o sesiones con entrenador personal. Es ideal para quienes buscan renovar cuerpo y mente.
4. Hotel Hostal Cuba: alma marinera en clave moderna
Barrio y ambiente local
Ubicado en pleno corazón de Santa Catalina, el barrio más auténtico y vibrante de Palma, Hostal Cuba respira la esencia de un antiguo pueblo marinero transformado en enclave bohemio. Rodeado de mercados como el Mercat de Santa Catalina, bares de tapas, galerías de arte emergente y tiendas vintage, es el punto de partida ideal para sumergirse en la vida local. El edificio modernista de 1904, con sus detalles arquitectónicos originales, es un verdadero símbolo del vecindario y un imán para fotógrafos y amantes del diseño.
Piscina y vistas de 360°
La terraza elevada permite ver la catedral, el puerto y los tejados multicolor del barrio. Por la noche, se convierte en Sky Bar, con música suave y una atmósfera relajada.
Diseño y confort
Las habitaciones, cada una con su propio carácter, logran una armonía entre lo rústico y lo sofisticado. Paredes de ladrillo visto, textiles en tonos tierra y detalles de metal dorado crean una atmósfera acogedora y contemporánea. Algunas estancias cuentan con amplias ventanas que enmarcan vistas al mar o al casco antiguo, y bañeras independientes estratégicamente ubicadas para disfrutar del paisaje mientras se toma un baño. El minibar sorprende con delicias locales: vino tinto de Binissalem, aceite de oliva virgen extra y frutos secos de producción artesanal.
Brunch y estilo de vida
El Brunch Café del hotel es famoso entre los locales, con platos fotogénicos y sabrosos. Recomendamos el “brunch con cava” del fin de semana, ideal para comenzar el día con placer y calma.
5. Hotel Saratoga: tradición con alma musical

Historia y personalidad
Fundado en 1962 y recientemente renovado, el Hotel Saratoga es un clásico reinventado que combina elegancia atemporal con un espíritu dinámico. Ubicado entre el centro histórico y el puerto deportivo, ofrece fácil acceso a los principales atractivos de Palma, sin renunciar a la tranquilidad. Su legado musical es único en la ciudad: el hotel alberga el famoso «Saratoga Blue Jazz Club», que durante décadas ha acogido a artistas de renombre internacional, convirtiéndose en un punto de referencia cultural tanto para locales como para visitantes.
Piscina con melodía
La piscina en la azotea, con sus muebles blancos y cerámica azul, evoca el espíritu mediterráneo. Algunas noches, se ofrecen conciertos en vivo, convirtiendo el espacio en un mini live club al aire libre.
Habitaciones y servicios
Desde habitaciones básicas hasta suites familiares, todas son cómodas, silenciosas y bien equipadas. Algunas ofrecen vistas directas a la catedral o al puerto. Se recomienda elegir plantas altas y orientación sur.
Gastronomía y actividades
El restaurante “Jazz Brasserie” sorprende con platos temáticos como la “hamburguesa Blue Note” o el “postre Smooth Jazz”. Los fines de semana hay desayunos musicales y talleres de guitarra o mixología.
Consejos para reservar
Todos estos hoteles están disponibles en plataformas como Booking.com, Expedia, Hotels.com, Agoda o en sus páginas web oficiales. Se recomienda reservar con 1-2 meses de antelación para asegurar mejor tarifa y disponibilidad.
Si visitas Palma, regálate al menos una noche en uno de estos hoteles. Que el cielo azul desde la piscina y el eco de las campanas del casco antiguo se conviertan en el mejor recuerdo de tu escapada mediterránea.